martes, 30 de octubre de 2018

"Con muy poco"

Con muy poco

"Su cuerpo es duro y tosco
sobre este lujo del paisaje.
Vive ahora dentro de una joya
y no sabe que camina
sobre preciosa seda
y que va dejando tras él
pequeños cielos moribundos."
(Luis Pimentel)

"¿A qué compararé el reino de Dios? Es semejante a la levadura que una mujer tomó y metió en tres medidas de harina, hasta que todo fermentó."
 (Lc 13,20-21)

I

El mal comienza con muy poco.
Un tono de voz, una mirada,
el repetido y callado desencuentro
cotidiano, tan leve como dañino.
La palabra se puebla, entonces, de silencios;
y los silencios, de un temor sin nombre, 
de un dolor seco que va minando
cuerpo y alma vulnerados.

En la dirección contraria,
el bien comienza de igual modo:
esa voz, esa mirada,
encontrarte tan abierta, tan amable,
y tus palabras más banales
me llenan de ti como una sed saciada, 
cuerpo y alma en unidad
de amor con sentido.

¿A qué compararé la gracia de tu amor?
A la cruz que supe,
y a la redención de tu sonrisa.
El bien y el mal comienzan con muy poco.

II

Dicen que lo importante es difícil.
Bien pudiera ser.
Difícil y lento, incluso.
No es fácil acabar unos largos estudios, 
hacerse un alto funcionario,
abrir una empresa próspera y estable; 
no es fácil cavar, picar, vender, sonreír
durante cuarenta minutos o cuarenta años.
No es fácil mantener una familia, 
pagar una casa, vivir con la dignidad
que precisa nuestra valía y tanto esfuerzo. 
No es fácil hacerse un hueco
en la selva de ambiciones y de envidias.

Y cuando las sombras cubren el alma,
todo es difícil: levantarse
cada mañana, comer, dormir,
querer vivir, querer...

Quizá porque he fracasado en lo importante,
porque a veces hasta lo fácil
no lo era, me parece un milagro
la sucesión de los días, 
el vuelo de los pájaros, el verde de la hierba,
el amor de mi mujer o la belleza gratuita
que se dona sin causa, como la sonrisa
de un niño, como la adolescencia.

He fracasado en lo importante,
y hasta en lo fácil.
Y, sin embargo, soy feliz
con muy poco.

30-10-2018

Doiraje.

sábado, 27 de octubre de 2018

"El viñador y la higuera"

El viñador y la higuera

"A cada uno de nosotros se le ha dado la gracia según la medida del don de Cristo."
(Ef 4,7)

"Señor, déjala todavía este año". 
(Lc 13,8)

Hace tiempo que desnudo los silencios
con una paciencia exquisita.
No depende de mí ni la flor ni el fruto.
Pero el señor sembró,
y no sé cuál será la cosecha.
Ni tampoco cuándo.

Cuando hace sol, los pájaros
se posan en las secas ramas.
La brisa le hace bien a la melena
de hojas y de sombras. A veces
llueve con una lluvia que hace daño,
agua que hunde y que ahoga.
Las raíces no saben lo que absorben, 
toman lo que necesitan,
y la savia sube con rumor
de alimentos apenas presentidos.

Ha crecido;
no sabría decir cuánto.
Una sombra extensa la rodea
cuando más luz recibe.

A pesar del sol sin aire,
del agua que hunde y arranca,
sólo espero el perdón y la paciencia
de aquel que me quiso.

27-10-2018 

Doiraje.
 

martes, 23 de octubre de 2018

"Promesa"

Promesa

"Así pues, ya no sois extranjeros ni forasteros"
(Ef 2,20)

Es un camino largo la tierra prometida.
O tal vez el más corto. Lo cierto
es que hubo una promesa,
y la promesa, un destino.

Cabe andar kilómetros, montes, ríos,
ciudades, lenguas extrañas y miradas 
sin nombre. A pesar de todo,
no he caminado mucho:
nunca supe bien qué prometían,
de qué destino hablaban.

Pero hay que salir a lo que no se conoce,
aunque no te conozcan,
aunque el día, cegado,
sea una noche eterna.
Salir, salir a esa promesa
de un amor desconocido, 
sin saber el camino,
confiado en que alguien
te espera en ese lugar que buscas,
en esa tierra, entre esas gentes
en las que ya no eres extranjero.

Porque existe, aunque tú no lo sepas.

23-10-2018

Doiraje.

viernes, 19 de octubre de 2018

"Quedaba lejos"

Quedaba lejos

"Algo tiene, en verdad, quien está solo e indefenso.
Piensa que su carne tiene buen sabor.
Es mejor -piensa- frente al cazador
ser gorrión que perdiz."
(Umberto Saba)

"No tengáis miedo: no hay comparación entre vosotros y los gorriones."
(Luc 12,7)

El mundo quedaba lejos.
Lejos tras los visillos de aquella ambigüedad
opaca, espesa, dulce de quien se esfuerza
a amar sin amor posible.
El mundo quedaba lejos.
Y no me decían nada.
No sé qué cuerdas tendían sobre mi cuerpo,
no sé qué nubes dejaban verde mi alma,
no sé qué palabras pudieron ayudarme.
No sé qué alas, qué noche, qué sigilos...

No soy gorrión ni perdiz, y tengo miedo.
Y frente al cazador, que no sabe mi sabor,
me siento solo e indefenso.
El mundo quedaba lejos,
sin comparación posible.
Sí: valemos más que muchos pájaros. 

18-10-2018

Doiraje.

miércoles, 17 de octubre de 2018

"Con qué"

Con qué

"Y los que son de Cristo Jesús han crucificado la carne con las pasiones y los deseos. Si vivimos por el Espíritu, marchemos tras el Espíritu."
(Gál 5,24-25)

Con qué labios te beso cuando te me ofreces.
Con qué manos acaricio tu presencia.
Con qué dicha digo tu nombre. 
 
Me gustaría ser de ti del mismo modo,
pero a veces la carne sin espíritu,
pero a veces el espíritu sin carne,
no me hace ser, no me deja ser
de nadie.

Dime, con qué labios, 
con qué manos,
con qué dicha
poder amarte. 

17-10-2018

Doiraje.

martes, 16 de octubre de 2018

"La ley y la gracia" de Doiraje

La ley y la gracia

 "Los que pretendéis ser justificados en el ámbito de la ley, habéis roto con Cristo, habéis salido del ámbito de la gracia." 
 (Gál 5,4)

Una tarde hermosa de mediados de octubre.
El sol ilumina la librería de esta habitación.
Me queda a la espalda. La luz va de poniente,
pero aún es fuerte y hasta alegre.
Afuera, en la esquina de la ventana,
tendiendo un puente entre verja y pared,
brilla el hilo de una telaraña olvidada,
                                                       y lo tiñe
de una vida que ya no posee.

Los libros callan un saber ya inútil,
una voluntad que sabe de su error,
como la araña que abandonó su construcción,
o que murió por los fríos de las duras
madrugadas.

Pero la luz los ilumina, les da el calor verdadero
que poseyeron o quisieron poseer.

Mi pelo cano brilla con una luz
no mía.

 16-10-2018

Doiraje.

Propuesta de continuación

Quisiera proseguir con este peculiar blog desde otra perspectiva. Esta vez se podría denominar "Escrituras del día", pues la idea es colgar poemas propios que pueda componer al hilo de las lecturas del día de la Sagrada Biblia. Evidentemente, es imposible que pueda mantener el ritmo de publicación que he seguido hasta ahora. Al respecto no quiero plantearme compromiso alguno en este sentido, dada la imposibilidad de prever cuando pueda redactar un poema que merezca ser leído al menos. Pero cuando lo crea tener, lo compartiré aquí, pues un poema guardado en un cajón es muy parecido a una sepultura sin nombre o a un cadáver de alguien desconocido.

Los poemas no están registrados, así que quien quiera hacerlos suyos no me importa lo más mínimo. No tengo la menor ambición literaria, ni persigo ver mi nombre en las tapas de ningún libro. A estas alturas de mi vida estas ambiciones me quedan muy lejos. Seguiré firmándolos con mi nick que ya conocéis, Doiraje. Lo que busco, además de expresarme, es que sirvan. Y si lo logran alguna vez, ese será mi mejor pago.

Sin más preámbulos, y después de seis años sin componer ni un sólo verso, ya tengo el primer poema de esta nueva etapa del blog. Lo publicaré en el siguiente post.

jueves, 4 de octubre de 2018

Despedida

Cumplido razonablemente el objetivo inicial que me propuse al comenzar este blog un 16 de septiembre de 2015, creo llegado el momento de ponerle fin. En estos tres años he cubierto las lecturas de los tres ciclos litúrgicos. Aunque no he escrito todos los días, las cifras resultantes dan una idea de lo razonable de este esfuerzo: casi un millar de poemas colgados, más de trescientos autores citados, más de quinientos comentarios... El primer sorprendido de esta constancia soy yo. Supongo que no habré acertado muchas veces, ni en la elección de los poemas, ni en la meditación comentada. Lo único de lo que estoy seguro es de mi tranquilidad de conciencia: lo he intentado hacer lo mejor posible. Por otra parte, creo con sinceridad no haber hecho afirmación doctrinal o moral gravemente errónea. Seguro que no me expresé bien en según qué cosa o que no supe ser lo explícito que requería la cuestión, etc. En cualquier caso, fui sincero siempre en este empeño que a mí no me toca valorar.

Reconozco haber pasado por momentos de cansancio, de querer dejarlo; pero ha habido otros, mucho más numerosos, que los han compensado con creces. Puedo decir que hacer este blog ha sido una experiencia maravillosa que ha trascendido con mucho mis expectativas primeras. Ha sido para mí un motivo y un lugar de hallazgos y descubrimientos. Hallazgos y descubrimientos en la Palabra de Dios que hasta ahora no había reparado, y de hallazgos y descubrimientos de poetas, no pocos totalmente desconocidos para mí. Si al comienzo pensé que este era un proyecto enteramente mío, con el paso de los meses, la dirección del blog se me fue, de forma bendita, yendo de las manos. Al menos el último año y medio yo ya no decidía nada; el blog iba por sí solo. Si no fuera pretencioso decirlo por mi parte, cabría afirmar que el Señor se hizo cargo de esta empresa. Esa fue la época de los hallazgos a los que antes me refería. Y me dejé hacer en la medida que fui perdiendo el miedo a no dirigir lo que supuse con ingenuidad mío.

Deseo de corazón que haya podido ayudar a alguien a acercarse a las Sagradas Escrituras sin prejuicios. Esa era mi finalidad principal. Por ello puse en relación el mundo de Dios con el de los hombres, poetas muchos de los cuales eran agnósticos, homosexuales, alcohólicos, comunistas, enfermizamente tímidos e inseguros, vanidosos, solitarios, depresivos..., pero todos con algo en común: buscaban a Dios, incluso desesperadamente, aun sin saberlo. La poesía es la forma más profunda de escritura. Esa profundidad no está relacionada tanto con la complejidad formal de la misma, como con la hondura de su contenido, de su relación íntima con la verdad humana. La poesía es una forma esencial de libertad, y nos hace libres porque está llena de verdad. Es la verdad de la que forma parte lo que hace a la palabra palabra poética. En efecto, la verdad nos hace libres, nos hace buenos, nos hace bellos: la verdad lleva al canto.

Quiero dar las gracias a los amigos que me han dado ánimos para continuar. Cuando se está solo, esa presencia es invalorable siempre. Gracias, pues, a César, a Rocky y sus formidables traducciones y su no menos formidables generosidad y atención, a Gabriel, a Miguel Ángel, a Gregorio, a Rubén, a Kufisto, a Priede, a Sergio, a Luis..., y a todos los que en silencio sé que me habéis visitado, incluso con asiduidad. Sin vosotros, este esfuerzo no tendría ningún sentido. Dios quiera que este blog le haya hecho bien a alguien alguna vez. Con esto ya me daría por satisfecho.

Las despedidas cuanto más breves mejor. Es hora de decir adiós o hasta siempre. ...O hasta luego, que los caminos de Dios sólo Él los conoce.

Agradeciendo de nuevo vuestra confianza y atención, recibid un saludo muy afectuoso.

Un abrazo a todos en el Señor.

Doiraje.