miércoles, 30 de septiembre de 2015

Lecturas del día, miércoles, 30 de septiembre. Poema "Rima LX" de Gustavo Adolfo Bécquer. Y breve comentario final a modo de dedicatoria


Primera lectura
Lectura del libro de Nehemías (2,1-8):

Era el mes de Nisán del año veinte del rey Artajerjes. Tenía el vino delante, y yo tomé la copa y se la serví. En su presencia no debía tener cara triste.
El rey me preguntó: «¿Qué te pasa, que tienes mala cara? Tú no estás enfermo, sino triste.»
Me llevé un susto, pero contesté al rey: «Viva su majestad eternamente. ¿Cómo no he de estar triste cuando la ciudad donde se hallan enterrados mis padres está en ruinas, y sus puertas consumidas por el fuego?»
El rey me dijo: «¿Qué es lo que pretendes?»
Me encomendé al Dios del cielo y respondí: «Si a su majestad le parece bien, y si está satisfecho de su siervo, déjeme ir a Judá a reconstruir la ciudad donde están enterrados mis padres.»
El rey y la reina, que estaba sentada a su lado, me preguntaron: «¿Cuánto durará tu viaje, y cuándo volverás?»
Al rey le pareció bien la fecha que le indiqué y me dejó ir.
Pero añadí: «Si a su majestad le parece bien, que me den cartas para los gobernadores de Transeufratina, a fin de que me faciliten el viaje hasta Judá. Y una carta dirigida a Asaf, superintendente de los bosques reales para que me suministren tablones para las puertas de la ciudadela de templo, para el muro de la ciudad y para la casa donde me instalaré.»
Gracias a Dios, el rey me lo concedió todo.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 136,1-2.3.4-5.6

R/.
Que se me pegue la lengua al paladar
si no me acuerdo de ti


Junto a los canales de Babilonia
nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión;
en los sauces de sus orillas
colgábamos nuestras cítaras. R/.

Allí los que nos deportaron
nos invitaban a cantar;
nuestros opresores, a divertirlos:
«Cantadnos un cantar de Sión.» R/.

¡Cómo cantar un cántico del Señor
en tierra extranjera!
Si me olvido de ti, Jerusalén,
que se me paralice la mano derecha. R/.

Que se me pegue la lengua al paladar
si no me acuerdo de ti,
si no pongo a Jerusalén
en la cumbre de mis alegrías. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9,57-62):

En aquel tiempo, mientras iban de camino Jesús y sus discípulos le dijo uno: «Te seguiré adonde vayas.»
Jesús le respondió: «Las zorras tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.»
A otro le dijo: «Sígueme.»
Él respondió: «Déjame primero ir a enterrar a mi padre.»
Le contestó: «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios.»
Otro le dijo: «Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia.»
Jesús le contestó: «El que echa mano al arado y sigue mirando atrás no vale para el reino de Dios.»

Palabra del Señor 

Poema:
Rima LX de Gustavo Adolfo Bécquer 

Mi vida es un erial,
flor que toco se deshoja;
que en mi camino fatal
alguien va sembrando el mal
para que yo lo recoja. 


Breve comentario final a modo de dedicatoria. 

Desde hace dos días, cada mañana, cuando voy camino de la iglesia donde acudo a escuchar misa, me sale al encuentro una joven madre, hispanoamericana, medio mulata, con un carrito de bebé, y llevando un perrito suelto. Yo iba solo, como todas las mañanas; pero ella, la joven madre, la del lactante en su carrito, sabe que arrastro una vieja herida por la que suelo sangrar. Mi mujer siente un pánico cerval a los perros sueltos, por pequeños que sean. Durante años y años, alguien, algunos, han ido sembrando el mal, intentando hacer de mi vida, de nuestra vida, un erial, un camino fatal, jugando con este incurable padecimiento de mi mujer, que hago mío porque la amo. Y nos sacaban los perros sueltos. Y se reían del terror de mi mujer y de mi impotencia.

Dedicada esta rima inmortal, como todas las suyas, de Gustavo Adolfo a esta mujer, joven, madre, mulata, con su hijo recién nacido, que cada mañana me espera para sembrar el mal en mi corazón con la única esperanza de que yo lo recoja.

martes, 29 de septiembre de 2015

Lecturas del día, martes, 29 de septiembre. Poema "El infinito" de Giacomo Leopardi

Primera lectura

Lectura de la profecía de Zacarías (8,20-23):

Así dice el Señor de los Ejércitos: Todavía vendrán pueblos y habitantes de grandes ciudades, y los de una ciudad irán a otra diciendo: «Vayamos a implorar al Señor, a consultar al Señor de los Ejércitos. – Yo también voy contigo.» Y vendrán pueblos incontables y numerosas naciones a consultar al Señor de los Ejércitos en Jerusalén y a implorar su protección. Así dice el Señor de los Ejércitos: Aquel día diez hombres de cada lengua extranjera agarrarán a un judío por la orla del manto, diciendo: «Queremos ir con vosotros, pues hemos oído que Dios está con vosotros.»

Palabra de Dios

Salmo

Sal 86,1-3.4-5.6-7

R/.
Dios está con nosotros

Él la ha cimentado sobre el monte santo;
y el Señor prefiere las puertas de Sión
a todas las moradas de Jacob.
¡Qué pregón tan glorioso para ti, ciudad de Dios! R/.

«Contaré a Egipto y a Babilonia entre mis fieles;
filisteos, tirios y etiópes han nacido allí.»
Se dirá de Sión: «Uno, por uno todos han nacido en ella;
el Altísimo en persona la ha fundado.» R/.

El Señor escribirá en el registro de los pueblos:
«Éste ha nacido allí.»
Y cantarán mientras danzan:
«Todas mis fuentes están en ti.» R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9,51-56):

Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante. De camino, entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén.
Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: «Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?»
Él se volvió y les regañó y dijo: «No sabéis de que espíritu sois. Porque el Hijo del Hombre no ha venido a perder a los hombres, sino a salvarlos.»
Y se marcharon a otra aldea.

Palabra del Señor
 
Poema:
El infinito de Giacomo Leopardi
 
Siempre caro me fue este yermo collado, 
y este seto que priva a la mirada
de tanto espacio del último horizonte.
Mas sentado y contemplando, interminables
espacios más allá de él, y sobrehumanos
silencios, y una quietud hondísima
mi pensamiento oculta. Tanta que casi
el corazón se espanta. Y como oigo
expirar el viento en la espesura,
voy comparando ese infinito silencio
con esta voz: y a mí acude lo eterno, 
y las estaciones muertas, y la presente viva
y su música. Así que en esta
inmensidad se ahoga mi pensamiento
y naufragar me es dulce en este mar.
 
L'infinito
 
Sempre caro mi fu quest'ermo colle,
e questa siepe, che da tanta parte
dell'ultimo orizzonte il guardo esclude.
Ma sedendo e mirando, interminati
spazi di là da quella, e sovrumani
silenzi, e profondissima quiete
io nel pensier mi fingo, ove per poco
il cor non si spaura. E come il vento
odo stormir tra queste piante, io quello
infinito silenzio a questa voce
vo comparando: e mi sovvien l'eterno,
e le morte stagioni, e la presente
e viva, e il suon di lei. Così tra questa
immensità s'annega il pensier mio:
e il naufragar m'è dolce in questo mare.
 
 

lunes, 28 de septiembre de 2015

Lecturas del día, lunes, 28 de septiembre. Poema "Fuerza de lágrimas" de Lope de Vega


Primera lectura

Lectura de la profecía de Zacarías (8,1-8):

En aquellos días, vino la palabra del Señor de los ejércitos: «Así dice el Señor de los ejércitos: Siento gran celo por Sión, gran cólera en favor de ella. Así dice el Señor: Volveré a Sión y habitaré en medio de Jerusalén. Jerusalén se llamará Ciudad Fiel, y el monte del Señor de los ejércitos, Monte Santo. Así dice el Señor de los ejércitos: De nuevo se sentarán en las calles de Jerusalén ancianos y ancianas, hombres que, de viejos, se apoyan en bastones.
Las calles de Jerusalén se llenarán de muchachos y muchachas que jugarán en la calle. Así dice el Señor de los ejércitos: Si el resto del pueblo lo encuentra imposible aquel día, ¿será también imposible a mis ojos? –oráculo del Señor de los ejércitos–. Así dice el Señor de los ejércitos: Yo libertaré a mi pueblo del país de oriente y del país de occidente, y los traeré para que habiten en medio de Jerusalén. Ellos serán mi pueblo, y yo seré su Dios con verdad y con justicia.»

Palabra de Dios

Salmo

Sal 101,16-18.19-21.29.22-23

R/.
El Señor reconstruyó Sión, y apareció en su gloria

Los gentiles temerán tu nombre,
los reyes del mundo, tu gloria.
Cuando el Señor reconstruya Sión,
y aparezca en su gloria,
y se vuelva a las súplicas de los indefensos,
y no desprecie sus peticiones. R/.

Quede esto escrito para la generación futura,
y el pueblo que será creado alabará al Señor.
Que el Señor ha mirado desde su excelso santuario,
desde el cielo se ha fijado en la tierra,
para escuchar los gemidos de los cautivos
y librar a los condenados a muerte. R/.

Los hijos de tus siervos vivirán seguros,
su linaje durará en tu presencia,
para anunciar en Sión el nombre del Señor,
y su alabanza en Jerusalén,
cuando se reúnan unánimes los pueblos
y los reyes para dar culto al Señor. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9,46-50):

En aquel tiempo, los discípulos se pusieron a discutir quién era el más importante.
Jesús, adivinando lo que pensaban, cogió de la mano a un niño, lo puso a su lado y les dijo: «El que acoge a este niño en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí acoge al que me ha enviado. El más pequeño de vosotros es el más importante.»
Juan tomó la palabra y dijo: «Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre y, como no es de los nuestros, se lo hemos querido impedir.»
Jesús le respondió: «No se lo impidáis; el que no está contra vosotros está a favor vuestro.»

Palabra del Señor 

Poema:
Fuerza de lágrimas de Lope de Vega 

Con ánimo de hablarte en confianza
de su piedad, entré en el templo un día,
donde Cristo en la Cruz resplandecía
con el perdón, que quien le mira, alcanza.

Y aunque la fe, el amor y la esperanza
a la lengua pusieron osadía,
acordéme que fue por culpa mía;
y quisiera de mí tomar venganza.

Ya me volvía sin decirle nada,
y como vi la llaga del costado,
paróse el alma en lágrimas bañada.

Hablé, lloré y entré por aquel lado;
porque no tiene Dios puerta cerrada
al corazón contrito y humillado.

domingo, 27 de septiembre de 2015

Lecturas del día, domingo, 27 de septiembre. Poema "La esposa de Lot" de Anna Ajmatova


Primera lectura
Lectura del libro de los Números (11,25-29):

El Señor bajó en la nube y habló a Moisés; tomó parte del espíritu que había en él y se lo pasó a los setenta ancianos. Cuando el espíritu de Moisés se posó sobre ellos, comenzaron a profetizar, pero esto no volvió a repetirse. Dos de ellos se habían quedado en el campamento, uno se llamaba Eldad y otro Medad. Aunque estaban entre los elegidos, no habían acudido a la tienda. Pero el espíritu vino también sobre ellos y se pusieron a profetizar en el campamento.
Un muchacho corrió a decir a Moisés: «Eldad y Medad están profetizando en el campamento.»
Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde joven, intervino diciendo: «¡Señor mío, Moisés, prohíbeselo!»
Moisés replicó: «¿Tienes celos por mí? ¡Ojalá que todo el pueblo profetizara y el Señor infundiera en todos su espíritu!»

Palabra de Dios

Salmo

Sal 18

R/.
Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón

La ley del Señor es perfecta
y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. R/.

La voluntad del Señor es pura
y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son verdaderos
y enteramente justos. R/.

Aunque tu siervo vigila
para guardarlos con cuidado,
¿quién conoce sus faltas?
Absuélveme de lo que se me oculta. R/.

Preserva a tu siervo de la arrogancia,
para que no me domine:
así quedaré libre e inocente
del gran pecado. R/.

Segunda lectura

Lectura de la carta de Santiago (5,1-6):

Vosotros los ricos, gemid y llorad ante las desgracias que se os avecinan. Vuestra riqueza está podrida y vuestros vestidos son pasto de la polilla. Vuestro oro y vuestra plata están oxidados y este óxido será un testimonio contra vosotros y corroerá vuestras carnes como fuego. ¿Para qué amontonar riquezas si estamos en los últimos días? Mirad, el jornal de los obreros que segaron vuestros campos y ha sido retenido por vosotros está clamando y los gritos de los segadores están llegando a oídos del Señor todopoderoso. En la tierra habéis vivido lujosamente y os habéis entregado al placer; con ello habéis engordado para el día de la matanza. Habéis condenado, habéis asesinado al inocente, y ya no os ofrece resistencia.

Palabra de Dios

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Marcos (9,38-43.45.47-48):

En aquel tiempo, Juan dijo a Jesús: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre y se lo hemos prohibido, porque no es de nuestro grupo.»
Jesús replicó: «No se lo prohibáis, porque nadie que haga un milagro en mi nombre puede luego hablar mal de mí. Pues el que no está contra nosotros está a favor nuestro. Os aseguro que el que os dé a beber un vaso de agua porque sois del Mesías no quedará sin recompensa. Al que sea ocasión de pecado para uno de estos pequeños que creen en mí, más le valdría que le colgaran del cuello una piedra de molino y lo echaran al mar. Y si tu mano es ocasión de pecado para ti, córtatela. Más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos al fuego eterno que no se extingue. Y si tu pie es ocasión de pecado para ti, córtatelo. Más te vale entrar cojo en la vida, que ser arrojado con los dos pies al fuego eterno. Y si tu ojo es ocasión de pecado para ti, sácatelo. Más te vale entrar tuerto en el reino de Dios que ser arrojado con los dos ojos al fuego eterno, donde el gusano que roe no muere y el fuego no se extingue.»

Palabra del Señor

Poema:
La esposa de Lot de Anna Ajmatova 

"La esposa de Lot miró hacia atrás
Y quedó convertida en estatua de sal."
(Génesis)
  
Iba el piadoso tras el enviado de Dios,
inmenso y luminoso por la oscura montaña.
Pero fuertemente dijo la angustia a la esposa:
No es tarde, aún puedes ver
las hermosas torres de la Sodoma natal,
la plaza donde cantaste, el palacio donde hilaste,
las ventanas vacías de la casa grande,
donde le diste hijos al esposo amado.
Miró y, cercados por el dolor mortal,
sus ojos no vieron más;
y su cuerpo se hizo sal cristalina,
y sus piernas ligeras se adhirieron a la tierra. 

¿Quién llorará a esta mujer?
¿Creería ser la menor pérdida?
Sólo mi corazón no olvidará nunca
la vida entregada por una mirada. 

Лотова жена
Жена же Лотова оглянулась позади
его и стала соляным столпом.
Книга Бытия.


И праведник шел за посланником Бога,
Огромный и светлый, по черной горе.
Но громко жене говорила тревога:
Не поздно, ты можешь еще посмотреть
На красные башни родного Содома,
На площадь, где пела, на двор, где пряла,
На окна пустые высокого дома,
Где милому мужу детей родила.
Взглянула – и, скованы смертною болью,
Глаза ее больше смотреть не могли;
И сделалось тело прозрачною солью,
И быстрые ноги к земле приросли.


Кто женщину эту оплакивать будет?
Не меньшей ли мнится она из утрат?
Лишь сердце мое никогда не забудет
Отдавшую жизнь за единственный взгляд. 

sábado, 26 de septiembre de 2015

Lecturas del día, sábado, 26 de septiembre. Poema "Sabiduría" de Walt Whitman


Primera lectura

Lectura de la profecía de Zacarías (2,5-9.14-15a):

Alcé la vista y vi a un hombre con un cordel de medir. Pregunté: «¿Adónde vas?»
Me contestó: «A medir Jerusalén, para comprobar su anchura y longitud.»
Entonces se adelantó el ángel que hablaba conmigo, y otro ángel le salió al encuentro, diciéndole: «Corre a decirle a aquel muchacho: "Por la multitud de hombres y ganado que habrá, Jerusalén será ciudad abierta; yo la rodearé como muralla de fuego y mi gloria estará en medio de ella –oráculo del Señor–."»
«Alégrate y goza, hija de Sión, que yo vengo a habitar dentro de ti –oráculo del Señor–. Aquel día se unirán al Señor muchos pueblos, y serán pueblo mío, y habitaré en medio de ti.»

Palabra de Dios

Salmo

Jr 31,10.11-12ab.13

R/.
El Señor nos guardará como un pastor a su rebaño

Escuchad, pueblos, la palabra del Señor,
anunciadla en las islas remotas:
«El que dispersó a Israel lo reunirá,
lo guardará como un pastor a su rebaño.» R/.

«Porque el Señor redimió a Jacob,
lo rescató de una mano más fuerte.»
Vendrán con aclamaciones a la altura de Sión,
afluirán hacia los bienes del Señor. R/.

Entonces se alegrará la doncella en la danza,
gozarán los jóvenes y los viejos;
convertiré su tristeza en gozo,
los alegraré y aliviaré sus penas. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9,43b-45):

En aquel tiempo, entre la admiración general por lo que hacía, Jesús dijo a sus discípulos: «Meteos bien esto en la cabeza: al Hijo del hombre lo van a entregar en manos de los hombres.»
Pero ellos no entendían este lenguaje; les resultaba tan oscuro que no cogían el sentido. Y les daba miedo preguntarle sobre el asunto.

Palabra del Señor   

Poema:
Sabiduría de Walt Whitman  

Cuando miro hacia allá, veo que los resultados y las glorias [retroceden y se apiñan, siempre constreñidos,
Allá las horas, meses, años; allá los oficios, pactos, [establecimientos, aun los más pequeños,
Allá la vida cotidiana, el lenguaje, utensilios, política, personas, [propiedades;
Allá también nosotros, yo con mis hojas y mis cantos, confiado, [maravillado.
Como un padre que va a ver a su padre, llevo conmigo a mis hijos. 

viernes, 25 de septiembre de 2015

Lecturas del día, viernes, 25 de septiembre. Poema "Igual que vosotros" de Blas de Otero


Primera lectura

Lectura de la profecía de Ageo (2,1-9):

El año segundo del reinado de Darío, el día veintiuno del séptimo mes, vino la palabra del Señor por medio del profeta Ageo: «Di a Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judea, y a Josué, hijo de Josadak, sumo sacerdote, y al resto del pueblo: "¿Quién entre vosotros vive todavía, de los que vieron este templo en su esplendor primitivo? ¿Y qué veis vosotros ahora? ¿No es como si no existiese ante vuestros ojos? ¡Ánimo!, Zorobabel –oráculo del Señor–, ¡Ánimo!, Josué, hijo de Josadak, sumo sacerdote; ¡Ánimo!, pueblo entero –oráculo del Señor–, a la obra, que yo estoy con vosotros –oráculo del Señor de los ejércitos–. La palabra pactada con vosotros cuando salíais de Egipto, y mi espíritu habitan con vosotros: no temáis. Así dice el Señor de los ejércitos: Todavía un poco más, y agitaré cielo y tierra, mar y continentes. Pondré en movimiento los pueblos; vendrán las riquezas de todo el mundo, y llenaré de gloria este templo –dice el Señor de los ejércitos–. Mía es la plata y mío es el oro –dice el Señor de los ejércitos–. La gloria de este segundo templo será mayor que la del primero –dice el Señor de los ejércitos–; y en este sitio daré la paz –oráculo del Señor de los ejércitos.–"»

Palabra de Dios

Salmo

Sal 42,1.2.3.4

R/.
Espera en Dios, que volverás a alabarlo:
«Salud de mi rostro, Dios mío»


Hazme justicia, oh Dios,
defiende mi causa contra gente sin piedad,
sálvame del hombre traidor y malvado. R/.

Tú eres mi Dios y protector,
¿por qué me rechazas?,
¿por qué voy andando sombrío,
hostigado por mi enemigo? R/.

Envía tu luz y tu verdad:
que ellas me guíen
y me conduzcan hasta tu monte santo,
hasta tu morada. R/.

Que yo me acerque al altar de Dios,
al Dios de mi alegría;
que te dé gracias al son de la citara,
Dios, Dios mío. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9,18-22):

Una vez que Jesús estaba orando solo, en presencia de sus discípulos, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?»
Ellos contestaron: «Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.»
Él les preguntó: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?»
Pedro tomó la palabra y dijo: «El Mesías de Dios.»
Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie.
Y añadió: «El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día.»

Palabra del Señor 

Poema:
Igual que vosotros de Blas de Otero 

 Desesperadamente busco y busco
un algo, que sé yo qué, misterioso,
capaz de comprender esta agonía
que me hiela, no sé con qué, los ojos.

Desesperadamente, despertando
sombras que yacen, muertos que conozco,
simas de sueño, busco y busco un algo,
qué se yo dónde, si supieseis cómo.

A veces, me figuro que ya siento,
que sé yo qué, que lo alzo y lo toco,
que tiene corazón y que está vivo,
no sé en qué sangre o red, como un pez rojo.

Desesperadamente, le retengo,
cierro el puño, apretando el aire sólo…
Desesperadamente, sigo y sigo
buscando, sin saber por qué, en lo hondo.

He levantado piedras frías, faldas
tibias, rosas, azules, de otros tonos,
 y allí no había más que sombra y miedo,
no sé de qué, y un hueco silencioso.

Alcé la frente al cielo: lo miré
y me quedé, ¡por qué, oh Dios!, dudoso:
dudando entre quién sabe, si supiera
Qué sé yo qué, de nada ya y de todo.

Desesperadamente, esa es la cosa.
Cada vez más sin causa y más absorto
qué sé yo en qué, sin qué, oh Dios, buscando
lo mismo, igual, oh hombres, que vosotros. 

jueves, 24 de septiembre de 2015

Lecturas del día, jueves, 24 de septiembre. Poema "Grito hacia Roma" de Federico García Lorca


Primera lectura

Comienzo de la profecía de Ageo (1,1-8):

El año segundo del rey Darío, el mes sexto, el día primero, vino la palabra del Señor, por medio del profeta Ageo, a Zorobabel, hijo de Salatiel, gobernador de Judea, y a Josué, hijo de Josadak, sumo sacerdote: «Así dice el Señor de los ejércitos: Este pueblo anda diciendo: "Todavía no es tiempo de reconstruir el templo."»
La palabra del Señor vino por medio del profeta Ageo: «¿De modo que es tiempo de vivir en casas revestidas de madera, mientras el templo está en ruinas? Pues ahora –dice el Señor de los ejércitos– meditad vuestra situación: sembrasteis mucho, y cosechasteis poco, comisteis sin saciaros, bebisteis sin apagar la sed, os vestisteis sin abrigaros, y el que trabaja a sueldo recibe la paga en bolsa rota. Así dice el Señor: Meditad en vuestra situación: subid al monte, traed maderos, construid el templo, para que pueda complacerme y mostrar mi gloria –dice el Señor–.»

Palabra de Dios

Salmo

Sal 149,1-2.3-4.5-6a.9b

R/.
El Señor ama a su pueblo

Cantad al Señor un cántico nuevo,
resuene su alabanza en la asamblea de los fieles;
que se alegre Israel por su Creador,
los hijos de Sión por su Rey. R/.

Alabad su nombre con danzas,
cantadle con tambores y cítaras;
porque el Señor ama a su pueblo
y adorna con la victoria a los humildes. R/.

Que los fieles festejen su gloria
y canten jubilosos en filas:
con vítores a Dios en la boca;
es un honor para todos sus fieles. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9,7-9):

En aquel tiempo, el virrey Herodes se enteró de lo que pasaba y no sabía a qué atenerse, porque unos decían que Juan había resucitado, otros que había aparecido Elías, y otros que había vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.
Herodes se decía: «A Juan lo mandé decapitar yo. ¿Quién es éste de quien oigo semejantes cosas?»
Y tenía ganas de ver a Jesús.

Palabra del Señor  

Poema: 
Grito hacia Roma de Federico García Lorca 

Manzanas levemente heridas
por los finos espadines de plata,
nubes rasgadas por una mano de coral
que lleva en el dorso una almendra de fuego,
peces de arsénico como tiburones,
tiburones como gotas de llanto para cegar una multitud,
rosas que hieren
y agujas instaladas en los caños de la sangre,
mundos enemigos y amores cubiertos de gusanos
caerán sobre ti. Caerán sobre la gran cúpula
que untan de aceite las lenguas militares
donde un hombre se orina en una deslumbrante paloma
y escupe carbón machacado
rodeado de miles de campanillas.

Porque ya no hay quien reparta el pan ni el vino,
ni quien cultive hierbas en la boca del muerto,
ni quien abra los linos del reposo,
ni quien llore por las heridas de los elefantes.
No hay más que un millón de herreros
forjando cadenas para los niños que han de venir.
No hay más que un millón de carpinteros
que hacen ataúdes sin cruz.
No hay más que un gentío de lamentos
que se abren las ropas en espera de la bala.
El hombre que desprecia la paloma debía hablar,
debía gritar desnudo entre las columnas,
y poner una inyección para adquirir la lepra
y llorar un llanto tan terrible
que disolviera sus anillos y sus teléfonos de diamante.
Pero el hombre vestido de blanco
ignora el misterio de la espiga,
ignora el gemido de la parturienta,
ignora que Cristo puede dar agua todavía,
ignora que la moneda quema el beso de prodigio
y da la sangre del cordero al pico idiota del faisán.

Los maestros enseñan a los niños
una luz maravillosa que viene del monte;
pero lo que llega es una reunión de cloacas
donde gritan las oscuras ninfas del cólera.
Los maestros señalan con devoción las enormes cúpulas [sahumadas;
pero debajo de las estatuas no hay amor,
no hay amor bajo los ojos de cristal definitivo.
El amor está en las carnes desgarradas por la sed,
en la choza diminuta que lucha con la inundación;
el amor está en los fosos donde luchan las sierpes del hambre,
en el triste mar que mece los cadáveres de las gaviotas
y en el oscurísimo beso punzante debajo de las almohadas. 
Pero el viejo de las manos traslúcidas
dirá: amor, amor, amor,
aclamado por millones de moribundos;
dirá: amor, amor, amor,
entre el tisú estremecido de ternura;
dirá: paz, paz, paz,
entre el tirite de cuchillos y melones de dinamita;
dirá: amor, amor, amor,
hasta que se le pongan de plata los labios.

Mientras tanto, mientras tanto, ¡ay!, mientras tanto,
los negros que sacan las escupideras,
los muchachos que tiemblan bajo el terror pálido de los [directores,
las mujeres ahogadas en aceites minerales,
la muchedumbre de martillo, de violín o de nube,
ha de gritar aunque le estrellen los sesos en el muro,
ha de gritar frente a las cúpulas,
ha de gritar loca de fuego,
ha de gritar loca de nieve,
ha de gritar con la cabeza llena de excremento,
ha de gritar como todas las noches juntas,
ha de gritar con voz tan desgarrada
hasta que las ciudades tiemblen como niñas
y rompan las prisiones del aceite y la música,
porque queremos el pan nuestro de cada día,
flor de aliso y perenne ternura desgranada,
porque queremos que se cumpla la voluntad de la Tierra
que da sus frutos para todos.

martes, 22 de septiembre de 2015

Lecturas del día, martes, 22 de septiembre. Poema "No decía palabras" de Luis Cernuda


Primera lectura

Lectura del libro de Esdras (6,7-8.12b.14-20):

En aquellos días, el rey Darío escribió a los gobernantes de Transeufratina: «Permitid al gobernador y al senado de Judá que trabajen reconstruyendo el templo de Dios en su antiguo sitio. En cuanto al senado de Judá y a la construcción del templo de Dios, os ordeno que se paguen a esos hombres todos los gastos puntualmente y sin interrupción, utilizando los fondos reales de los impuestos de Transeufratina. La orden es mía, y quiero que se cumpla a la letra. Darío.»
De este modo, el senado de Judá adelantó mucho la construcción, cumpliendo las instrucciones de los profetas Ageo y Zacarías, hijo de Idó, hasta que por fin la terminaron, conforme a lo mandado por el Dios de Israel y por Ciro, Darío y Artajerjes, reyes de Persia. El templo se terminó el día tres del mes de Adar, el año sexto del reinado de Darío. Los israelitas, sacerdotes, levitas y resto de los deportados, celebraron con júbilo la dedicación del templo, ofreciendo con este motivo cien toros, doscientos carneros, cuatrocientos corderos y doce machos cabríos, uno por tribu, como sacrificio expiatorio por todo Israel. El culto del templo de Jerusalén se lo encomendaron a los sacerdotes, por grupos, y a los levitas, por clases, como manda la ley de Moisés. Los deportados celebraron la Pascua el día catorce del mes primero; como los levitas se habían purificado, junto con los sacerdotes, estaban puros e inmolaron la víctima pascual para todos los deportados, para los sacerdotes, sus hermanos, y para ellos mismos.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 121,1-2.3-4a.4b-5

R/.
Vamos alegres a la casa del Señor

¡Qué alegría cuando me dijeron:
«Vamos a la casa del Señor»!
Ya están pisando nuestros pies
tus umbrales, Jerusalén. R/.

Jerusalén está fundada
como ciudad bien compacta.
Allá suben las tribus,
las tribus del Señor. R/.

Según la costumbre de Israel,
a celebrar el nombre del Señor;
en ella están los tribunales de justicia,
en el palacio de David. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (8,19-21):

En aquel tiempo, vinieron a ver a Jesús su madre y sus hermanos, pero con el gentío no lograban llegar hasta él.
Entonces lo avisaron: «Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren verte.»
Él les contestó: «Mi madre y mis hermanos son éstos: los que escuchan la palabra de Dios y la ponen por obra.»

Palabra del Señor  

Poema:
No decía palabras de Luis Cernuda 

No decía palabras,
Acercaba tan sólo un cuerpo interrogante,
Porque ignoraba que el deseo es una pregunta
Cuya respuesta no existe,
Una hoja cuya rama no existe,
Un mundo cuyo cielo no existe. 


La angustia se abre paso entre los huesos,
Remonta por las venas
Hasta abrirse en la piel,
Surtidores de sueño
Hechos carne en interrogación vuelta a las nubes. 


Un roce al paso,
Una mirada fugaz entre las sombras,
Bastan para que el cuerpo se abra en dos,
Ávido de recibir en sí mismo
Otro cuerpo que sueñe;
Mitad y mitad; sueño y sueño, carne y carne;
Iguales en figura, iguales en amor, iguales en deseo. 


Aunque sólo sea una esperanza,
Porque el deseo es una pregunta cuya respuesta nadie sabe.

lunes, 21 de septiembre de 2015

Lecturas del día, lunes, 21 de septiembre. Poema "El sol en Candelaria" de Vladimir Holan


Primera lectura

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (4,1-7.11-13):

Yo, el prisionero por el Señor, os ruego que andéis como pide la vocación a la que habéis sido convocados. Sed siempre humildes y amables, sed comprensivos, sobrellevaos mutuamente con amor; esforzaos en mantener la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz. Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como una sola es la esperanza de la vocación a la que habéis sido convocados. Un Señor, una fe, un bautismo. Un Dios, Padre de todo, que lo trasciende todo, y lo penetra todo, y lo invade todo. A cada uno de nosotros se le ha dado la gracia según la medida del don de Cristo. Y él ha constituido a unos, apóstoles, a otros, profetas, a otros, evangelizadores, a otros, pastores y maestros, para el perfeccionamiento de los santos, en función de su ministerio, y para la edificación del cuerpo de Cristo; hasta que lleguemos todos a la unidad en la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios, al hombre perfecto, a la medida de Cristo en su plenitud.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 18,2-3.4-5

R/.
A toda la tierra alcanza su pregón

El cielo proclama la gloria de Dios,
el firmamento pregona la obra de sus manos:
el día al día le pasa el mensaje,
la noche a la noche se lo susurra. R/.

Sin que hablen, sin que pronuncien,
sin que resuene su voz,
a toda la tierra alcanza su pregón
y hasta los límites del orbe su lenguaje. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Mateo (9,9-13):

En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: «Sígueme.»
Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: «¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?»
Jesús lo oyó y dijo: «No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa "misericordia quiero y no sacrificios": que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.»

Palabra del Señor  

Poema:
El sol en Candelaria de Vladimir Holan

Tempestad de nieve... El sol por algún lado en Turingia...
Aparte de eso nada, ni un amago de semejanza...
Los sueños, los signos, las imágenes, hasta la humedad de los muros
podría salvarlos sólo una ayuda sobrenatural...

He amado y en cambio no me acuerdo ya.
En la vida, por la vida, venía a mi encuentro la muerte
siempre en el mismo sitio,
pero ni siquiera la ignorancia significa felicidad...

Terrible es mi soledad cuando muda me ordena
ser más impersonal pero no para todo el mundo... Un poema
es un don... Sí, pero lo hablado vale más que lo escrito...
¡Qué daría por un amigo!

domingo, 20 de septiembre de 2015

Lecturas del día, domingo, 20 de septiembre. Poema "El poeta y el conformista" de Umberto Saba


Primera lectura

Lectura del libro de la Sabiduría (2,12.17-20):

Se dijeron los impíos: «Acechemos al justo, que nos resulta incómodo: se opone a nuestras acciones,nos echa en cara nuestros pecados, nos reprende nuestra educación errada; veamos si sus palabras son verdaderas, comprobando el desenlace de su vida. Si es el justo hijo de Dios, lo auxiliará y lo librará del poder de sus enemigos; lo someteremos a la prueba de la afrenta y la tortura, para comprobar su moderación y apreciar su paciencia; lo condenaremos a muerte ignominiosa, pues dice que hay quien se ocupa de él.»

Palabra de Dios

Salmo

Sal 53,3-4.5.6 y 8

R/.
El Señor sostiene mi vida

Oh Dios, sálvame por tu nombre,
sal por mí con tu poder.
Oh Dios, escucha mi súplica,
atiende a mis palabras. R/.

Porque unos insolentes se alzan contra mí,
y hombres violentos me persiguen a muerte,
sin tener presente a Dios. R/.

Pero Dios es mi auxilio,
el Señor sostiene mi vida.
Te ofreceré un sacrificio voluntario,
dando gracias a tu nombre, que es bueno. R/.

Segunda lectura

Lectura de la carta del apóstol Santiago (3,16–4,3):

Donde hay envidias y rivalidades, hay desorden y toda clase de males. La sabiduría que viene de arriba ante todo es pura y, además, es amante de la paz, comprensiva, dócil, llena de misericordia y buenas obras, constante, sincera. Los que procuran la paz están sembrando la paz, y su fruto es la justicia. ¿De dónde proceden las guerras y las contiendas entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, que luchan en vuestros miembros? Codiciáis y no tenéis; matáis, ardéis en envidia y no alcanzáis nada; os combatís y os hacéis la guerra. No tenéis, porque no pedís. Pedís y no recibís, porque pedís mal, para dar satisfacción a vuestras pasiones.

Palabra de Dios

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Marcos (9,30-37):

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se marcharon de la montaña y atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos. Les decía: «El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará.» Pero no entendían aquello, y les daba miedo preguntarle.
Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó: «¿De qué discutíais por el camino?»
Ellos no contestaron, pues por el camino habían discutido quién era el más importante. Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo: «Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos.»
Y, acercando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: «El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí no me acoge a mí, sino al que me ha enviado.»

Palabra del Señor  

Poema:
El poeta y el conformista de Umberto Saba  

¡Cómo te envidio, amigo! Anclado a tu fe
con firmeza, vives en paz
con los hombres y los dioses. Discurres,
escribes fácilmente, conforme a los deseos
de tu amo. Él, en cambio, te da
pan, y a veces hasta te acaricia.
Ningún arma te apunta; quiebra
tu sonrisa toda amenaza. Y pasas,
entre los hombres y sucesos, casi indemne. 

Algo tiene, en verdad, quien está solo e indefenso.
Piensa que su carne tiene un buen sabor.
Es mejor -piensa- frente al cazador
ser gorrión que perdiz. 

Il poeta e il conformista 

Come t'invidio, amico! Alla tua fede
saldamente ancorato, in pace vivi
con gli uomini e gli dei. Discorri scrivi
agevole, conforme volontà
del tuo padrone. In cambio egli ti dà
pane e, quale sua cosa, ti accarezza.
Arma non ti si appunta contro; spezza
il tuo sorriso ogni minaccia. E passi,
tra gli uomini e gli eventi, quasi illeso. 

V'ha chi solo si pensa ed indifeso.
Pensa che la sua carne ha un buon sapore.
Meglio -pensa- chi è in vista al cacciatore
passero che pernice.  

sábado, 19 de septiembre de 2015

Lecturas del día, sábado, 19 de septiembre. Poema "¡Espera, luz, espera!..." de Juan Ramón Jiménez

Primera lectura

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a Timoteo (6,13-16):

En presencia de Dios, que da la vida al universo, y de Cristo Jesús, que dio testimonio ante Poncio Pilato con tan noble profesión: te insisto en que guardes el mandamiento sin mancha ni reproche, hasta la manifestación de nuestro Señor Jesucristo, que en tiempo oportuno mostrará el bienaventurado y único Soberano, Rey de los reyes y Señor de los señores, el único poseedor de la inmortalidad, que habita en una luz inaccesible, a quien ningún hombre ha visto ni puede ver. A él honor e imperio eterno. Amén.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 99

R/.
Entrad en la presencia del Señor con vítores

Aclama al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría,
entrad en su presencia con vítores. R/.

Sabed que el Señor es Dios:
que él nos hizo y somos suyos,
su pueblo y ovejas de su rebaño. R/.

Entrad por sus puertas con acción de gracias,
por sus atrios con himnos,
dándole gracias y bendiciendo su nombre. R/.

«El Señor es bueno,
su misericordia es eterna,
su fidelidad por todas las edades.» R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (8,4-15):

En aquel tiempo, se le juntaba a Jesús mucha gente y, al pasar por los pueblos, otros se iban añadiendo. Entonces les dijo esta parábola: «Salió el sembrador a sembrar su semilla. Al sembrarla, algo cayó al borde del camino, lo pisaron, y los pájaros se lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso y, al crecer, se secó por falta de humedad. Otro poco cayó entre zarzas, y las zarzas, creciendo al mismo tiempo, lo ahogaron. El resto cayó en tierra buena y, al crecer, dio fruto al ciento por uno.»
Dicho esto, exclamó: «El que tenga oídos para oír, que oiga.»
Entonces le preguntaron los discípulos: «¿Qué significa esa parábola?»
Él les respondió: «A vosotros se os ha concedido conocer los secretos del reino de Dios; a los demás, sólo en parábolas, para que viendo no vean y oyendo no entiendan. El sentido de la parábola es éste: La semilla es la palabra de Dios. Los del borde del camino son los que escuchan, pero luego viene el diablo y se lleva la palabra de sus corazones, para que no crean y se salven. Los del terreno pedregoso son los que, al escucharla, reciben la palabra con alegría, pero no tienen raíz; son los que por algún tiempo creen, pero en el momento de la prueba fallan. Lo que cayó entre zarzas son los que escuchan, pero, con los afanes y riquezas y placeres de la vida, se van ahogando y no maduran. Los de la tierra buena son los que con un corazón noble y generoso escuchan la palabra, la guardan y dan fruto perseverando.»

Palabra del Señor
 
Poema:
 "¡Espera, luz, espera!..." de Juan Ramón Jiménez
 
¡Espera luz, espera!
-Y corro ansioso, loco-.
¡Espera, luz, espera!
-Espera, y cuando voy
a llegar a su lado, se oscurece,
fría-.
¡Espera, luz, espera!
-Y me echo al suelo, como un niño,
llorando para mí, y sin verla ya:
Espera...luz...espera...

viernes, 18 de septiembre de 2015

Lecturas del día, viernes, 18 de septiembre. Poema "Sólo dos cosas" de Gottfried Benn

Primera lectura
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a Timoteo (6,2c-12):

Esto es lo que tienes que enseñar y recomendar. Si alguno enseña otra cosa distinta, sin atenerse a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo y a la doctrina que armoniza con la piedad, es un orgulloso y un ignorante, que padece la enfermedad de plantear cuestiones inútiles y discutir atendiendo sólo a las palabras. Esto provoca envidias, polémicas, difamaciones, sospechas maliciosas, controversias propias de personas tocadas de la cabeza, sin el sentido de la verdad, que se han creído que la piedad es un medio de lucro. Es verdad que la piedad es una ganancia, cuando uno se contenta con poco. Sin nada vinimos al mundo, y sin nada nos iremos de él. Teniendo qué comer y qué vestir nos basta. En cambio, los que buscan riquezas caen en tentaciones, trampas y mil afanes absurdos y nocivos, que hunden a los hombres en la perdición y la ruina. Porque la codicia es la raíz de todos los males, y muchos, arrastrados por ella, se han apartado de la fe y se han acarreado muchos sufrimientos. Tú, en cambio, hombre de Dios, huye de todo esto; practica la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la delicadeza. Combate el buen combate de la fe. Conquista la vida eterna a la que fuiste llamado, y de la que hiciste noble profesión ante muchos testigos.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 48

R/.
Dichosos los pobres en el espíritu,
porque de ellos es el reino de los cielos


¿Por qué habré de temer los días aciagos,
cuando me cerquen y acechen los malvados,
que confían en su opulencia
y se jactan de sus inmensas riquezas,
si nadie puede salvarse ni dar a Dios un rescate? R/.

Es tan caro el rescate de la vida,
que nunca les bastará
para vivir perpetuamente
sin bajar a la fosa. R/.

No te preocupes si se enriquece un hombre
y aumenta el fasto de su casa:
cuando muera, no se llevará nada,
su fasto no bajará con él. R/.

Aunque en vida se felicitaba:
«Ponderan lo bien que lo pasas»,
irá a reunirse con sus antepasados,
que no verán nunca la luz. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (8,1-3):

En aquel tiempo, Jesús iba caminando de ciudad en ciudad y de pueblo en pueblo, predicando el Evangelio del reino de Dios; lo acompañaban los Doce y algunas mujeres que él había curado de malos espíritus y enfermedades: María la Magdalena, de la que habían salido siete demonios; Juana, mujer de Cusa, intendente de Herodes; Susana y otras muchas que le ayudaban con sus bienes.

Palabra del Señor

Poema:
Sólo dos cosas de Gottfried Benn 

He pasado por tantas formas,
por el yo, por el nosotros y por el tú,
pero todo quedó circunscrito
a la eterna pregunta del porqué.
 
Es una pregunta de niños.
Te diste cuenta más tarde
de que sólo había una respuesta: soporta
-sentido, afán o leyenda-
el "no te queda más remedio", decidido desde lejos. 

Que sean rosas, nieve o mares
lo que floreció, se ha marchitado,
sólo hay dos cosas: el vacío
y mi yo marcado.
  
NUR ZWEI DINGE
Durch so viel Formen geschritten,
durch Ich und Wir und Du,
doch alles blieb erlitten
durch die ewige Frage:wozu?

Das ist eine Kinderfage.
Dir wurde erst spät bewubt,
es gibt nur eines: ertrage
-ob Sinn, ob Sucht, ob Sage –
dein fernbestimmtes: Du mubt.

Ob Rosen, ob Schnee, ob Meere,
was alles erblühte, verblich,
es gibt nur zwei Dinge: die Leere
und das gezeichnete Ich.


 https://www.youtube.com/watch?v=b6Qo2h2c4Bo

Breve comentario sobre el sentido del blog

Sólo de pasada quisiera comentar brevemente el sentido de este blog y mis intenciones al abrirlo, dado que percibo cierto riesgo de malinterpretación, sobre todo entre la parroquia católica.

El hecho de poner juntos las lecturas litúrgicas con poemas de autores no necesariamente religiosos (pues no quedan excluidos los poetas creyentes), no tiene la intención de contraponerlos o buscar que se contrarresten entre sí. En absoluto. Como dije en la presentación, soy católico con todas sus consecuencias. La Palabra de Dios es la Palabra de Dios, nada menos. Y la palabra de estos excelentes poetas son la palabra de unos hombres, nada más. Por ello, antecede la Sagrada Escritura a los poemas, como indicación del orden de prelación que poseen ante cualquier otro escrito.

La idea de ponerlos juntos y unirlos bajo un mismo título, "Lecturas del día", más allá del hecho estrictamente objetivo de que lo son (lecturas de un día), quiere significar la idea de que entren en diálogo, de que el hombre que no cree, que duda, que se siente infeliz, vacío, aislado, o que vive la presencia de Dios de un modo conflictivo o problemático, pueda acercarse a la certeza de la revelación desde la comprensión de quien sabe, cree, confía y espera. Porque yo estuve entre los últimos (aun sin el talento de ellos, sí vitalmente), quiero poderles acercar a lo primero a quienes se sientan así, pues yo accedí a ellos a través de mi dolor, que fue antes el suyo y al que describieron de modo excelso. Hoy puedo sentir mucho desconsuelo, angustia, soledad, pero ya sé que existe una esperanza y una verdad, aunque sólo pueda acceder a ella circunstancialmente. Por ello, todos estos genuinos hombres que fueron poetas cumplen con un requisito fundamental que aquí se comparte: que son hombres que buscaron, aunque muchos de ellos no hallaran lo que les hubiera colmado.

Y qué mejor modo de lograr ese acercamiento que desde la belleza de quien busca de corazón, no tachándola de inadecuada o incompetente, sino aceptándola como la fuerza humana que nos puede abrir al misterio de la verdad. Como veremos en las lecturas litúrgicas de hoy, S. Pablo dice palabras durísimas con respecto a aquellos que están alejados de Dios. Sin poner en duda la certeza de las mismas, hay que entender que son palabras dirigidas en un contexto de guerra, por así decir. A un soldado que está en primera línea de fuego, defendiendo desesperadamente una posición o intentando ganar otra, no nos podemos dirigir con cantos nostálgicos o con inquietudes existenciales: debemos estimularlo al máximo para la lucha. Adoptar un sentido literal de esas afirmaciones paulinas, supone una falta total de entendimiento de lo que supone evangelizar y comprender la situación del otro. Hoy sólo se puede evangelizar dialogando. Y para dialogar hay que asumir como punto de partida lo que el otro nos trae, sin cribas, sin críticas, sin descalificaciones, sin miradas por encima del hombro.

Vayan estas breves aclaraciones para sosegar ánimos, sobre todo para aquellos que están dentro, que los de fuera, creo, no las necesitaban.

Y ahora las lecturas del día, las de Él y las nuestras.

jueves, 17 de septiembre de 2015

Lecturas del día, jueves, 17 de septiembre. Poema "El alquimista en la ciudad" de G. M. Hopkins


Primera lectura

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a Timoteo (4,12-16):

Nadie te desprecie por ser joven; sé tú un modelo para los fieles, en el hablar y en la conducta, en el amor, la fe y la honradez. Mientras llego, preocúpate de la lectura pública, de animar y enseñar. No descuides el don que posees, que se te concedió por indicación de una profecía con la imposición de manos de los presbíteros. Preocúpate de esas cosas y dedícate a ellas, para que todos vean cómo adelantas. Cuídate tú y cuida la enseñanza; sé constante; si lo haces, te salvarás a ti y a los que te escuchan.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 110,7-8.9.10

R/.
Grandes son las obras del Señor

Justicia y verdad son las obras de sus manos,
todos sus preceptos merecen confianza:
son estables para siempre jamás,
se han de cumplir con verdad y rectitud. R/.

Envió la redención a su pueblo,
ratificó para siempre su alianza,
su nombre es sagrado y temible. R/.

Primicia de la sabiduría es el temor del Señor,
tienen buen juicio los que lo practican;
la alabanza del Señor dura por siempre. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Lucas (7,36-50):

En aquel tiempo, un fariseo rogaba a Jesús que fuera a comer con él. Jesús, entrando en casa del fariseo, se recostó a la mesa. Y una mujer de la ciudad, una pecadora, al enterarse de que estaba comiendo en casa del fariseo, vino con un frasco de perfume y, colocándose detrás junto a sus pies, llorando, se puso a regarle los pies con sus lágrimas, se los enjugaba con sus cabellos, los cubría de besos y se los ungía con el perfume.
Al ver esto, el fariseo que lo había invitado se dijo: «Si éste fuera profeta, sabría quién es esta mujer que lo está tocando y lo que es: una pecadora.»
Jesús tomó la palabra y le dijo: «Simón, tengo algo que decirte.»
Él respondió: «Dímelo, maestro.»
Jesús le dijo: «Un prestamista tenía dos deudores; uno le debla quinientos denarios y el otro cincuenta. Como no tenían con qué pagar, los perdonó a los dos. ¿Cuál de los dos lo amará más?»
Simón contestó: «Supongo que aquel a quien le perdonó más.»
Jesús le dijo: «Has juzgado rectamente.»
Y, volviéndose a la mujer, dijo a Simón: «¿Ves a esta mujer? Cuando yo entré en tu casa, no me pusiste agua para los pies; ella, en cambio, me ha lavado los pies con sus lágrimas y me los ha enjugado con su pelo. Tú no me besaste; ella, en cambio, desde que entró, no ha dejado de besarme los pies. Tú no me ungiste la cabeza con ungüento; ella, en cambio, me ha ungido los pies con perfume. Por eso te digo: sus muchos pecados están perdonados, porque tiene mucho amor; pero al que poco se le perdona, poco ama.»
Y a ella le dijo: «Tus pecados están perdonados.»
Los demás convidados empezaron a decir entre sí: «¿Quién es éste, que hasta perdona pecados?»
Pero Jesús dijo a la mujer: «Tu fe te ha salvado, vete en paz.»

Palabra del Señor

Poema:
El alquimista en la ciudad de G. M. Hopkins

Mi ventana se abre a las viajeras nubes,
a las hojas caídas, las estaciones nuevas, al cielo en movimiento,
al flujo y al reflujo de las muchedumbres;
el mundo entero pasa; yo permanezco.
 
Ellos no desperdician sus bien medidas horas,
mas hombres y maestros planean y construyen;
y veo el coronarse de sus torres,
y cumplirse sus felices promesas.  

Y yo...quizás si mi proyecto osado
lo intentara en edad prediluviana,
los esfuerzos que hubiera yo empleado,
habrían obtenido así su herencia.  

Pero ahora aun antes que el crisol refluja
con el oro que nunca ha de ser descubierto,
inútilmente soplarán los fuelles
y el horno al fin se mantendrá apagado.  

Es tarde ya para curar ahora
la vergüenza incapaz y bochornosa
que me hace cuando trato con los hombres,
más sin poder que el ciego o el inválido.  

No, yo debería amar la ciudad menos
que esta mi ciencia popular e ingrata;
mas quiero los desiertos
o las lindes frondosas de la playa.  

Camino por airosos altozanos
para observar el poniente o el levante,
miro el revolear de las palomas
y el de las golondrinas por las torres  

altas, y el suelo, y abajo se entrecruzan
zigzagueando el aire ponderoso;
después encuentro sobre el horizonte
un sitio, y allí encontrarme anhelo.  

Entonces odio al máximo esta ciencia
que no lleva consigo ningún éxito;
y parece más dulce la playa sin morada
y el salvaje desierto libre y grato;  

o las antiguas tumbas guardadoras de huesos,
o las rocas que anidan las palomas torcaces,
o los árboles del terebinto y las ruinas,
y el silencio, y del aire el torbellino.  

Allí en profunda y escarpada altura,
puesto ya el sol, me quedaré muy quieto,
traspasaré la luz cerosa y amarilla
con una libre y larga mirada, y moriré.

 

The Alchemist in the City


My window shows the traveling clouds,
Leaves spent, new seasons, alter'd sky,
The making and melting crowds:
The whole world passes; I stand by. 

They do not waste their meted hours,
But men and masters plan and build:
I see the crowning of their towers,
And happy promises fulfill'd.

And I perhaps if my intent
Could count on prediluvian age,
The labors I should then have spent
Might so attain their heritage,

But before the pot can glow
With not to be discover'd gold,
At length the bellows shall not blow,
The furnace shall at last be cold. 

Yet it is now too late to heal
The incapable and cumbrous shame
Which makes me when with men I deal
More powerless than the blind or lame. 

No, I should love the city less
Even than this my thankless lore;
But I desire the wilderness
Or weeded landslips of the shore. 

I walk my breezy belvedere
To watch the low or levant sun,
I see the city pigeons veer,
I mark the tower swallows run

Between the tower-top and the ground
Below me in the bearing air;
Then find in the horizon-round
One spot and hunger to be there.

And then I hate the most that lore
That holds no promise of success;
Then sweetest seems the houseless shore,
Then free and kind the wilderness.

Or ancient mounds that cover bones,
Or rocks where rockdoves do repair
And trees of terebinth and stones
And silence and a gulf of air. 

There on a long and squared height
After the sunset I would lie,
And pierce the yellow waxen light
With free long looking, ere I die.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Lecturas del día, miércoles, 16 de septiembre. Poema: "Salta antes de mirar" de W. H. Auden

Primera lectura
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a Timoteo (3,14-16):

Aunque espero ir a verte pronto, te escribo esto por si me retraso; quiero que sepas cómo hay que conducirse en la casa de Dios, es decir, en la asamblea de Dios vivo, columna y base de la verdad. Sin discusión, grande es el misterio que veneramos: Manifestado en la carne, justificado en el Espíritu, contemplado por los ángeles, predicado a los paganos, creído en el mundo, llevado a la gloria.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 110,1-2.3-4.5-6

R/.
Grandes son las obras del Señor

Doy gracias al Señor de todo corazón,
en compañía de los rectos, en la asamblea.
Grandes son las obras del Señor,
dignas de estudio para los que las aman. R/.

Esplendor y belleza son su obra,
su generosidad dura por siempre;
ha hecho maravillas memorables,
el Señor es piadoso y clemente. R/.

Él da alimento, a sus fieles,
recordando siempre su alianza;
mostró a su pueblo la fuerza de su obrar,
dándoles la heredad de los gentiles. R/.

Evangelio de hoy 

Lectura del santo evangelio según san Lucas (7,31-35):

En aquel tiempo, dijo el Señor: «¿A quién se parecen los hombres de esta generación? ¿A quién los compararemos? Se parecen a unos niños, sentados en la plaza, que gritan a otros: "Tocamos la flauta y no bailáis, cantamos lamentaciones y no lloráis." Vino Juan el Bautista, que ni comía ni bebía, y dijisteis que tenía un demonio; viene el Hijo del hombre, que come y bebe, y decís: "Mirad qué comilón y qué borracho, amigo de publicanos y pecadores." Sin embargo, los discípulos de la sabiduría le han dado la razón.»

Palabra del Señor

Poema: (como este nuevo blog, saltemos aun sin mirar...)
Salta antes de mirar de W.H. Auden
La sensación de peligro no debe desaparecer:
el camino es sin duda tan corto como escarpado,
por muy escalonado que parezca desde aquí;
mira si quieres, pero tendrás que saltar.


Los hombres duros se ponen sentimentales cuando duermen
y quebrantan las ordenanzas que cualquier necio puede respetar;
no es la convención sino el miedo
lo que tiende a desaparecer.


Los esfuerzos preocupados de la masa atareada,
la suciedad, la imprecisión y la cerveza
producen todos los años algunas ocurrencias inteligentes;
ríete si puedes, pero tendrás que saltar.


La ropa considerada correcta para vestir
no será cómoda, ni será barata,
mientras consintamos en vivir como ovejas
y nunca mencionemos a aquellos que desaparecen.


Mucho puede decirse sobre el savoir-faire social,
pero alegrarse cuando no queda nadie más
es aún más difícil que llorar;
nadie está mirando, pero tienes que saltar.


Una soledad de diez mil brazas de profundidad
sostiene el lecho sobre el que descansamos, cariño:
aunque te ame, tendrás que saltar;
nuestro sueño de seguridad tiene que desaparecer.


Leap Before You Look

The sense of danger must not disappear:
The way is certainly both short and steep,
However gradual it looks from here;
Look if you like, but you will have to leap.

Tough-minded men get mushy in their sleep
And break the by-laws any fool can keep;
It is not the convention but the fear
That has a tendency to disappear.

The worried efforts of the busy heap,
The dirt, the imprecision, and the beer
Produce a few smart wisecracke every year;
Laugh if you can, but you will have to leap.

The clothes that are considered right to wear
Will not be either sensible or cheap,
So long as we consent to live like sheep
And never mention those who disappear.

Much can be said for social savior-faire,
Bu to rejoice when no one else is there
Is even harder than it is to weep;
No one is watching, but you have to leap.

A solitude ten thousand fathoms deep
Sustains the bed on which we lie, my dear:
Although I love you, you will have to leap;
Our dream of safety has to disappear.

https://www.youtube.com/watch?v=FUlJBd4yc-w

Presentación y bienvenida

Siempre que uno es presentado o se presenta ante alguien, es de persona bien educada saludar. Así que vaya por delante mis saludos cordiales a todos aquellos que quieran visitar este modesto "espacio". Y con el saludo, la sincera bienvenida. No importa las motivaciones que os hayan llevado hasta aquí, bienvenidos todos, salvo los que vengan a ofender, a molestar o a agredir. Para éstos, Internet ofrece muchas posibilidades de expresión; pero no será en este lugar.

Cumplido los requisitos primeros, queda la presentación. Intentaré en la medida de mis posibilidades no hacer de este hogar nuevo e improvisado un canto al egocentrismo, a pesar de mi tendencia a la vanidad o al orgullo. Como comienzo a tener una edad donde tales actitudes tornan a ser ridículas (si es que no lo son siempre, aunque sean más disculpables con los pocos años), y un itinerario de fracasos dilatado y de ya imposible reparación, evitaré que mi presencia sea fatigosa. Por ello, los objetivos que persigo con este blog son bien humildes, acorde con las limitadas capacidades de su titular.

Soy un varón español, nacido en 1963, madrileño para más señas. Vivo y escribo esto en una localidad a pocos kilómetros de mi ciudad natal. Da igual mi nombre, mi profesión, mi trayectoria y otros detalles que sinceramente no vienen al caso. Me pueden conocer por el nick que suelo utilizar, Doiraje, o bien por mi nombre de pila, Eduardo, para aquellos que sientan demasiada impersonalidad en el trato por medio de apodos. Lo único que pretendo es compartir una pequeña serie de inquietudes, en la medida que las sepa formular y en la medida que las sepa compartir. Y para ello me voy a servir de, por así decir, dos instrumentos: la Biblia y la poesía.

Porque de ellas pretende ir este blog, de la Palabra de Dios y de la palabra del hombre más bella y más genuina. Hay una cosa que sí deben saber: soy católico. Y católico con todas sus consecuencias. Es decir, asumo por entero la doctrina moral de la Iglesia, sin recortes ni subjetivas adaptaciones a mis debilidades (no pocas, pues, como cualquiera, soy un pecador). Ello no quiere decir que sea un católico ejemplar ni mucho menos, o que tenga hilo directo con el Señor o los santos que gozan de su presencia. No. Soy un católico converso, converso de muchos errores e ignorancias, desde hace casi 25 años, algo así como la mitad de mi vida. Ni siquiera soy un católico que se halle cómodo en su iglesia, ni en las páginas católicas al uso, ni en las beaterías o en las oraciones huecas. Pero bueno, ya estoy personalizando, y prometí que no lo haría.

Lo único que pretendo es reflejar una meta y la búsqueda de ella. Porque soy un simple pecador que busca a Dios. Intento seguir el camino que la Iglesia me marca. Se me hace duro muchas veces. Otras, parece que se allana el terreno. Y en no pocas ocasiones, el pecado dirige mis anhelos. Esto soy: no me disculpo. Es decir, soy como cualquier hombre. Ni más, ni menos. Por ello, dadas mi necesidad y mi debilidad, busco a Dios como la Iglesia enseña: por la Palabra, por los sacramentos, por la oración... Pero también por el afán humano, por el anhelo de verdad de todos los hombres, también de los más confundidos, de los que no han dejado de buscar. Pues entre ellos me identifico mucho más que entre los perfectos o los que se tienen por tales.

De esta tan humana conjunción de anhelos de verdad, de búsqueda y de pecado nace este blog, que espero sirva de pequeño hogar, de lugar de acogida, para los que andan también buscando. No otra es mi pretensión. Por ello, simplemente me propongo que las lecturas de cada día, como el pan que nos alimenta, sean las de la liturgia de cada jornada, junto con un poema de cualquier autor, de cualquier estilo, época, idioma, etc. Por supuesto, la mayoría de ellos serán agnósticos o ateos, gente profundamente equivocada, pero que seguían anhelando verdad, plenitud, felicidad. Y que supieron expresarlo de un modo extraordinario, cada uno según su talento y personalidad. Siempre procuraré colgar los poemas en español acompañados de su versión original cuando me sea posible. Si logro encontrar en you tube algún enlace a una hermosa recitación del mismo, también lo colgaré oportunamente, pues la poesía es también música y sonido, aun la menos rítmica. Eventualmente me permitiré la licencia de comentar algo sobre el poema elegido o sobre un pasaje de la Biblia de ese día, pero jamás será con erudición o pedantería, pues me falta formación y vocación para ello. El tono de los mismos siempre será personal, en cuanto que esté centrado en la experiencia o en la vivencia que de algún modo se desprende de los textos. 

Huelga decir que me gusta la poesía, y que yo mismo fui quien se buscaba a sí mismo a través de ella (y aún lo sigo haciendo de algún modo). Pero ya he dicho que no quisiera hablar de mí. Así que expresadas quedan mis intenciones, mis lecturas del día.

Sólo me resta indicar que la zona de comentarios está abierta a todos y no hay moderación previa. Si se me llena de indeseables, trolls y demás fauna, tomaría otras medidas. Pero qué menos que dejar la puerta abierta para que entréis con libertad. Y si no entráis, o sólo os asomáis sin atreveros a más, bien está por mi parte.